Pues si, hoy es San Valentín y para serles sincera, no tenia preparado un post para este día, solo me enfoque en darles lo mejor en recetas y consejos para verse lindas en este día pero la verdad es que ahora que salí a dar un paseo por Polanco y ver a tantas chicas guapas caminando por las calles, muy lindas y con una producción que a kilómetros se veía que les costó una desmañanada de 1 hora, un cambio de outfit para poder estrenar este día y mínimo unos $300-$500 pesos en el salón de belleza, seguramente todas ellas iba a ver a alguien especial, a su novio, a su esposo, a su mejor amiga o su date o prospecto, sea quien sea, esa persona las inspiró para verse y sentirse especiales el día de hoy.
Así que mientras iba caminando y me percataba de todo eso, veía emocionada a las chavitas de secundaria presumiendo sus globos, a niños de entre 14 y 15 que se acercaban a los puestos de flores tímidos para comparle algún arreglo a su chica y realmente valoré lo que se vive este día: no se trata del marketing (que todos critican hoy) no se trata tampoco de los chocolates ni las flores, se trata de que a toda mujer nos gusta sentirnos especiales. Nos gusta sentirnos bellas, deseadas, hermosas ¡y que nos lo digan! Aun las mas grinch, aún las mas “anti-amor” les firmo que no hay mujer en este planeta que no disfrute desde el cortejo de un hombre, del piropo de un amigo o hasta el intento de un poema de un pretendiente.
Lo importante es como todo esto te hace sentir; si te sientes bien lo reflejas y lo contagias. No importa que no tengamos el cuerpo de angelita de Victoria’s Secret (..aún buajajaja) ni el abdomen marcado, no importa esa maldita celulitis que odiamos, ni ser bajitas, esos defectos que (a veces) solo vemos nosotras en el espejo, no es opacable ni en un 1% a la belleza que reflejamos cuando nos sentimos bien y nos amamos a nosotras mismas. Cuando amamos lo que somos y lo que hacemos, cuando adornamos nuestra cara con una sonrisa, saludamos amablemente a todos y proyectamos seguridad, proyectamos una belleza que ningún tratamiento podrá igualar.
A veces nos enfrascamos tanto en las dietas, los tratamientos, las cremas antiarrugas y las “pósimas” de belleza, que olvidamos el secreto mas grande para la belleza natural: la positividad. En los últimos años me he dado cuenta que esa es la crema mas cara y valiosa que nos podemos poner, la máscara de felicidad que realmente nos hace ver radiantes y que provoca que los demás nos volteen a ver.
Conozco a un par de mujeres que tal vez no ganarían el concurso de Miss Universo, pero que son tan seguras de si misma, tan hermosas por dentro, que siempre están sonriendo o proyectando sentimientos positivos que las hace ver inigualablemente hermosas ¡y lucen como modelos!
En este San Valentín, amemos lo que somos, lo que tenemos y lo que nos tocó, no invirtamos tanto tiempo en lamentarnos por lo que no tenemos, por el cuerpo que deseamos y no logramos tener, por el pelo lacio y perfecto que la genética no nos dio o por las boobies de revista que no tenemos, me parece que invertir tiempo en estas “desgracias” nos opaca y nos roba luz propia, las invito hoy y el resto de los días a brillar y sacar esa princesa que todas tenemos dentro.
Gracias por leerme… ¡las quiero!
♡